A veces, una decisión incorrecta puede arruinar toda tu vida.
El deseo de ser madre era muy fuerte para Defne y no veía otra salida, cómo recurrir a los servicios de gestación subrogada.
Encontraron a la mujer, todo salió bien y los felices esposos pronto se convertirán en padres. Quizás, si por “buenas” intenciones, la suegra no se entrometiera, todo les iría bien.
Pero Kiimet-khanym deseaba tanto a su nieto que le importaban un comino los principios y deseos de los niños y tomó una decisión fatídica. Dado que Defne no puede convertirse en madre, déjela convertirse en madre sustituta. Pero nadie necesita saberlo.
Pero no importa cómo ocultes la verdad, siempre saldrá a la luz. Y Defne se entera de que ella no es la madre del niño tan esperado, y luego Kahraman se entera.
Kahraman no pudo perdonar las mentiras a su madre y esposa, y durante dos días no apareció en casa.
Pero, encontró a Elif fugitivo y la instaló con su amigo, con quien él mismo decidió pasar la noche.
Y tuvo que suceder que Defne llegó en el mismo momento en que el bebé de Elif comenzó a pujar y el feliz papá le puso la mano en el estómago para sentir ese momento.
Defne los encontró haciendo esto.
Los celos cegaron a la mujer, y ella, como un huracán, barrió todo de la mesa, en la que estaba el desayuno, para sus fieles. Y luego se fue corriendo.
Kahraman alcanzó a su esposa, pero nunca esperó escuchar lo que escuchó:
- Hemos llegado al final de nuestro viaje. Quiero divorciarme de ti. Estamos fallando, fallando.
Defne esperaba que su esposo la calmara, pero después de una larga pausa, respondió:
- Bueno, si así lo deseas, nos divorciaremos.
El idilio familiar se ha resquebrajado y es poco probable que sea posible pegarlo.