Cómo enseñarle a un niño a guardar secretos

Si tu bebé menos de 6 años, ni siquiera tienes que intentar convencerlo de que mantenga la boca cerrada. Alrededor de los 6-7 años de edad, un niño es más consciente de la importancia de un secreto, pero puede contarlo por accidente o sin pensar.

Y solo más cerca de la adolescencia, se puede confiar en el niño. Pero, ¿cómo acercar este momento y enseñarle al niño a guardar secretos?

1. Secretos: seguridad familiar

Explique que no debe contarle a nadie fuera de su hogar sobre la vida de la familia. Incluso sobre dinero, compras, planes, salud, cualquier información personal.

Si el niño habla de esto con extraños, pondrá en peligro a la familia. Esto debe comprenderlo y recordarlo bien.

Si el niño quiere contarle algo al maestro o amigos, debe pedirle permiso.

2. Pequeños entrenamientos

Pídale a su hijo periódicamente que mantenga algo en secreto. Por ejemplo, un regalo para papá o abuelos. Debe mantener el secreto durante al menos unas horas, gradualmente este tiempo se puede aumentar.

No olvides animar también a tu hijo, señalar que aprecias su capacidad para guardar secretos, puedes confiar en él, etc.

3. Ejemplo personal

Si tus redes sociales están llenas de fotos del niño e historias sobre él, a las que no consintió, si difunde todo lo que puede a sus amigos y parientes, entonces el bebé percibe tal comportamiento como normal.

En consecuencia, se comportará de la misma manera. Y pronto descubrirás en las redes sociales algo que no era para ellos para nada.

Lo mismo ocurre con los chismes y hablar de los secretos de otras personas. Demuéstrele a su hijo que usted mismo sabe cómo guardar silencio y no contarle los secretos de otras personas.

4. Temas no infantiles

Si el tema no está destinado a los oídos de los niños, debe discutirse en ausencia del bebé. Entonces no le preguntará qué entendió de lo que se dijo y a quién le pasará esta información.

Y el niño, sin embargo, puede no darse cuenta de que dañará a alguien si comparte lo que ha escuchado con sus amigos.

5. Secretos peligrosos

Enséñele a su hijo qué secretos nunca deben guardarse: se relacionan con el abuso sexual, físico y emocional.

Todo lo relacionado con la seguridad y la vida no debe mantenerse en secreto para los padres.

6. Carga pesada

Guardar secretos puede resultar muy difícil, incluso para los adultos. Y la mejor prevención es no asumir esta carga y deliberadamente no aprender los secretos de otras personas.

Por supuesto, a los niños les encantan los secretos y no pueden negarse si se les pide que cuenten algo así.

Pero es posible que un adolescente ya se niegue a escuchar información, que luego tendrá que ocultarse y callarse.

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