Hubo una propuesta para considerar que el riesgo distinto de cero de desarrollar una formación maligna en cualquiera de nosotros es bastante ofensivo e injusto. Bueno, le puede pasar a todo el mundo, no es justo, y por eso nacimos así.
Aquí, hermanos, puede haber muchas explicaciones diferentes, pero me gusta esto: no vivimos como tíos y tías separados. Vivimos contigo como una especie biológica.
Érase una vez, nadamos en el océano primordial como algunas babosas, y luego gradualmente nos volvimos más difíciles, nos arrastramos hacia la tierra, nos paramos sobre dos piernas e incluso hicimos hachas de piedra para nosotros mismos.
Si todo dentro de nosotros funcionara de acuerdo con el mismo escenario, todavía estaríamos nadando en ese mismo océano. Pero constantemente aparecen mutaciones en nuestras células. Gracias a estas mutaciones, nuestra descendencia es ligeramente diferente a la nuestra. A veces son tan diferentes que ya pueden arrastrarse desde el océano hasta la tierra. A veces, por el contrario, se vuelven inviables y mueren. Evolución. Y la variabilidad (mutaciones) impulsa esta evolución. Y estas mismas mutaciones nos pueden hacer crecer un tumor maligno en cualquier parte del cuerpo.
Nuestros organismos son capaces de reproducirse y transmitir a sus descendientes algunos signos nuevos, pero los organismos tampoco aceptan morir prematuramente por alguna mutación. La inmunidad está ahí, todo está... Sabemos cómo combatir este cáncer.
En resumen, mutaremos constantemente, correremos el riesgo de contraer cáncer, lo esperaremos, nos someteremos a mamografías y otros exámenes de detección, comeremos más verduras y frutas para la prevención. Esto esta bien. Porque gracias a tales mutaciones, hemos adquirido un cerebro desarrollado y ahora estamos atrapados en Internet.
¿Sabes siquiera que estamos en la cima de la pirámide alimenticia? Podemos comer carne de oso, aletas de tiburón y colas de cocodrilo todos los días. Los comemos, pero ellos no nos comen a nosotros. Todo esto se debe a la evolución. Así que acepta este regalo de la naturaleza con gratitud. Bueno, pasa por las proyecciones a tiempo. ¡Tenga cuidado también con los carcinógenos, por favor! No necesitamos fumar, y también es mejor no dejarse llevar por la carne ahumada.
¿Tiene otros ejemplos del trato injusto de la madre naturaleza hacia nosotros?